Después de haber tenido que tirar un batch entero por la fregadera debido a una infección funesta provocada por utilizar piel de mandarinas momificadas, el siguiente lote parece que nos salió bastante decente, era una weizen, pero debido a una ingente cantidad de borrachos ávidos de cerveza casera, apenas nos han quedado botellas y no sabemos como envejece. Algunas botellas todavía quedarán escondidas en la cueva de Alibabá, pero la verdad es que no la he probado ya reposada.
Ahora ha tocado deschapar la última que hemos preparado, teníamos miedo también de que se hubiera infectado, porque una botella que abrimos la semana pasada, estaba con el aroma un poco avinagrado, por suerte parece que ha sido cosa de una botella guarra (¡viva el reciclaje!) y no se ha repetido, por lo menos en esta última. Es una pale ale con MarisOtter de base y una buena carga de Tomahawk. No llega a ser un hopkick que sería más atractivo para una APA, carece de cuerpo y le falta un poco de maltosidad. Entra muy fácil y está rica, pero un poco insípida.
A seguir trabajando!
Reciclaje no, re-utilización, jajajaja. MarisOtter, Tomahawk, vamos una APA en toda regla, le falta un poco de Amarillo, como si lo oliera. ¿Cuándo quedamos para una elaboración conjunta?
ResponderEliminarAnimo y duro con el lactobacilo.